Hace un mes, la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, declaraba en la Vanguardia que el cannabis no es una medicina y que mientras se disponen de un arsenal de medicinas para el dolor, con respecto a esta sustancia no hay evidencia científica en ese sentido, para Carcedo tampoco las terapias como la acupuntura, osteopatía u homeopatía tienen evidencia científica, a lo mejor porque ella no la conoce o prefiere evitar conocerla…
Anxo Machado | Xornal Galego
Así, la ministra Carcedo cerraba la puerta al cannabis con uso terapéutico a la pregunta de se apoyaría legalizarlo para fines terapéuticos, la ministra Carcedo puso el punto final concluyendo que se trataba de un tema de moda que había que ponerlo en contexto.
Tras estas declaraciones, otro de los que tal bailan en el campo de mezclar el chamanismo con las terapias naturales, Francisco Igea, portavoz de Sanidad de Ciudadanos, uno de los defensores de la regulación del cannabis, pero enemigo número uno de las terapias naturales, registró en el Congreso preguntas las palabras de Carcedo en el citado periódico catalán.
Las preguntas de Igea eran mordaces y podrían formularsele la él incluso sobre las terapias naturales. Iges preguntaba si los pacientes que en España la utilizan deben de continuar adquiriéndola de manera ilegal y sin control alguno o se creía que los países que lo autorizaron (EE.UU., Canadá, Dinamarca o Bélgica) lo habían hecho sin evidencia científica suficiente. Sería curioso responderle eso sobre la acupuntura, homeopatía…
Preguntado por C’s, el Ministerio afirma que «el cannabis es un estupefaciente», que «está regulado cómo tal en la normativa vigente» y que se permite su uso «con finalidad terapéutica».
Francisco Igea. En declaraciones a consalud subrayó que es uno sin sentido que María Luisa Carcedo diga que no hay evidencia científica. Por desgracia parece que en el campo de las terapias naturales Carcedo e Igea siguen sin ver la evidencia en todos esos países que parecen conocer para buscar documentación y evidencia a favor del cannabis, a lo mejor a ambos les gusta mas Bob Marley que una sesión de Tai Chi para relajarse…